línea regional Comenzaré desde el principio a explicarlo. Mi jefe es un tipo guapo, bastante comprensivo, pero está casado. Soy una rubia de 1.70 de estatura y una dama muy sexy. Al principio, mi jefe y yo teníamos una relación jefe-empleado. Después de un cierto período de tiempo, esta relación había entrado en un estado de ánimo más íntimo. Mi jefe y yo podríamos hablar de todo ahora.Un día, mi jefe y yo íbamos a almorzar e íbamos a almorzar solos por primera vez. Cuando llegaron nuestras comidas, mi jefe preguntó si podíamos tomar una copa de vino. Dije que tal vez, y tomamos una copa de vino. Cuando terminamos de comer y bebimos nuestros vinos, sentí que mi jefe me miraba con otros ojos de lo habitual. Al principio me sentí incómodo, pero luego me sentí aliviado por el placer que daba en su vino. Solo nos mirábamos a los ojos, no hablábamos. Mi jefe comenzó a decir lo hermosa que eres y agregó que me sentí un poco avergonzado cuando dijo que no podía tener suficiente de mirarte. Pero me armé de valor y dije que tú también eres muy guapo. Estas palabras salieron de mi boca en un instante. Ni siquiera yo podía creer que estuviera diciendo esto things.My boss se habrá sentido alentado por estas palabras mías, que dijo que deseaba que nos hubiéramos conocido antes de casarnos. Estaba teniendo otro shock y dije que lo desearía. Hubo un silencio por todas partes de nuevo. Los dos nos queríamos, era obvio de cada uno de nosotros. Mi jefe estaba casado, pero era muy guapo y simpático. Obtuve ganancias, iba a ser suya esta noche a toda costa. Nuestro silencio fue roto por las palabras del camarero, ¿te gustaría otra copa de vino? Los dos dijimos que sí al mismo tiempo. Luego nos miramos y nos reímos.Cuando el camarero llenó nuestros vasos, bebí el kedeh en un punto y pregunté si podía tomar otro vaso. Me enojé cuando mi jefe dijo, oh, eres demasiado rápido. Pensé que entendías mis intenciones. Mientras bebía mi tercer vaso, mi jefe sonreía y solo me miraba. „No te rías, todo es por ti que me estás haciendo girar la cabeza“, le dije con expresión de enojo. Mi jefe, tú también me mareas, eres tan hermosa y sexy, y cuando dices lo que no daría por tenerte conmigo en este momento, entonces a qué estamos esperando, realmente te quiero a ti también, vamos al hotel dedim.Bi en el momento en que nos encontramos en una habitación de hotel, tan pronto como cruzamos la puerta, nuestros labios se juntaron y nos estábamos besando como locos. Mientras nos besábamos, nos robábamos el uno al otro del otro lado. En un instante nos encontramos desnudos y en la cama. Mi jefe soltó mis labios, lamió primero mi cuello y luego mis senos, y lentamente descendió hacia abajo. Cuando llegó a mi ombligo, yo estaba inconsciente. Comenzó a lamerme el coño bajando por mi barriga de allí para bajar. Meter y sacar la lengua y luego caminar afuera fue un placer increíble. Cuanto más lamía, más enojada estaba, y no podía soportarlo más, así que vine. Había lamido y tragado todos mis líquidos. Cuando terminaron mis contracciones y recuperé el sentido por completo, inmediatamente agarré su polla y me la llevé a la boca. Primero llevé su cabeza a mi boca y lo lamí y besé. Luego comencé a profundizar lentamente, pero no cabía en mi boca. Como era muy grande, tenía una polla de unos 20 cm, era muy gruesa y no cabía toda en mi boca.Luego me acostó y tomamos la posición 69, y la habitación me estaba lamiendo mientras yo lamía esa gran polla. Metió la lengua en mi coño y la sacó, luego la lamió comenzando desde mi coño hasta mi agujero trasero y la metió de nuevo en mi coño. El hecho de que su lengua tocara mi trasero realmente me excitaba. Me han follado en el coño antes, pero mi culo nunca ha tenido una polla. Por un momento quise esta polla gruesa en mi agujero trasero, y me sobreexcitó. Lo estaba disfrutando tanto, vamos, amor mío, me senté en su regazo, diciéndome que te quiero ahora, y agarré su polla, la coloqué en mi coño y me lancé a sus brazos. Él me sostenía con fuerza por las caderas y me hacía rebotar en su regazo. Me estaba levantando y soltando de mis caderas y metiéndome profundamente en mi coño como laap. Lo estaba disfrutando tremendamente, era muy espeso y me estaba llenando. Pero la idea de que me follaran por el culo en este momento todavía estaba en mi mente, y había escuchado de mis amigos que dolía. Mientras me preguntaba si podría recogerlo, mi jefe dijo que vendría y comenzó a recogerme y dejarme más rápido. Vamos, león, separa mis muslos, aplástame el coño y comencé a eyacular. Pero qué eyaculación estaba teniendo.Cuando terminamos de eyacular, me levanté de él y lo llevé a la boca de nuevo, todavía quería que me follaran, y dije que quería esta gran polla en mi trasero. Estas palabras también deben haber irritado a mi jefe, lo que inmediatamente endureció. También tengo muchas ganas de follarme este trasero, dijo que tienes unas caderas geniales. Luego, cuando le dije qué representas, dijo que tengo miedo de lastimarte. Dije que incluso si me duele o me rompe el trasero, quiero esa polla en mi trasero. Ante estas palabras, mi jefe se pegó a mis labios. Él estaba chupando mis labios en pedazos y mordiéndolos. Luego me hizo agacharme y comenzó a lamerme el culo. Metió la lengua dentro y fuera de ella, y a veces me dio golpes con la lengua en el coño. Dic.Y estaba empezando a rogarle que viniera, me lo metiera, me rompiera el culo. Diciendo que no te apresures, me metió los dedos en la boca y me pidió que la mojara, mientras yo le lamía los dedos, la habitación seguía lamiéndome el culo. Luego puso su polla en mi boca y comenzó a meter sus dedos mojados en mi culo uno por uno. Primero entró y salió un dedo, luego dos y tres. Lo estaba disfrutando mucho y no podía soportarlo más. Lo enrollé frente a ti y dije, vamos, mételo. Iba a morir de emoción cuando agarró tu polla y la puso contra mi agujero trasero. Mi culo iba a ser follado por una polla por primera vez, una polla gruesa.Estaba presionando su polla contra mi trasero, pero no entraba. Cuando dije vamos, empújame, aplástame el trasero, cargó más rápido y su cabeza estaba metida. Con la entrada de su cabeza, solté un grito tremendo, estoy seguro de que mi voz se escuchó incluso desde la recepción. Dolió mucho, pero sabía que te acostumbrarías. Mi jefe salió de mí de inmediato para no lastimarme. Lo acosté y volví a meter su polla en mi boca y la mojé bien. Debería haber tomado esta polla, agarrarla por el torso, alinearla con mi trasero y sentarme, dejándome caer sobre ella. Todo fue de un solo golpe, pero estaba muy dolido. Mi jefe me tapaba la boca para que no se escuchara mi voz. Me senté en él en su totalidad durante un rato. El dolor comenzaba a desaparecer y lentamente comencé a sentarme. Cuanto más me sentaba, más comenzaba a disfrutarlo. Él estaba enfrentando a mi jefe, deteniéndome de mis escapes y ayudándome a sentarme. Ahora el dolor había dado paso al placer. Vamos, amor, separa mis muslos, aplasta mi trasero, empújalo todo, estaba saltando sobre él. Por un lado, nos estábamos besando, nuestros gritos resonaban en la habitación y mi jefe se puso de pie mientras yo estaba en su regazo. Estábamos de pie y yo todavía estaba en su regazo, él separó mis caderas y me hizo rebotar en la parte superior de su polla. Y estaba disfrutando que me follaran por el culo envuelto alrededor de tu cuello.Separó mis muslos de ambos lados, rebotándome en su polla, y los dos estábamos volando de placer, cuando dije que venía, sentí que la polla dentro de mí se volvía más gruesa, ahora él me rebotaba más rápido en su regazo. Los dos estábamos eyaculando al mismo tiempo y disfrutándolo tremendamente. Estuve en su regazo hasta que su pene se hizo más pequeño y lo disfruté mucho.Fuimos juntos al baño y comenzamos a lavarnos. Mientras acariciaba y lavaba la polla de mi jefe en mi mano, vi que se movía de nuevo y comencé a lamerlo llevándolo a la boca. Fue como una estaca de nuevo, la habitación estaba metiendo sus dedos jabonosos hacia arriba y fuera de mi trasero mientras lamía. Aparentemente, le gustaba mi culo apretado y dije mi culo de polla acostándome frente a él. Me sostuvo por las caderas de tal manera que comencé a disfrutar diciendo oohhh. Luego la puse contra la pared y comencé a presionar mis caderas contra ella. Él ya no estaba jodiendo, yo estaba jodiendo. Él estaba quieto, yo estaba acurrucada frente a él, moviendo mis caderas hacia adelante y hacia atrás, follándome el culo con placer.Cuando dijo que vendría, inmediatamente me arrodillé frente a él y le dije que eyaculara sobre mí. Estaba sosteniendo su polla y acariciándola, la habitación retumbaba, brotando en mi cara hacia mis senos. Cuando terminó de eyacular, me lo llevé a la boca y lo chupé, lamí y tragué las últimas gotas restantes.Ese día no fuimos a trabajar después de cenar y follamos muchas veces hasta la noche.Al día siguiente no pude sentarme boca abajo en el trabajo. Todavía quería una polla,y llevaba una falda corta, pero no llevaba ropa interior. Me levanté de mi asiento y fui a la habitación de mi jefe. Entré sin llamar y cerré la puerta por dentro tan pronto como entré. Mi jefe sonrió y dijo: Creo que no has tenido suficiente gusto como yo. Cuando dije que sí, me arrodillé frente a él y lo abrí. Le saqué la polla y comencé a lamerla, y pronto fue como una estaca. Sin perder tiempo, me levanté la falda, me senté sobre ella y comencé a follarme. Me agarró por las caderas y me estaba rebotando en su regazo. Los dos habíamos eyaculado al mismo tiempo, y ahora mi jefe me llamaba a su habitación cada vez que quería y me follaba durante horas.Y a veces lo sorprendía y entraba a su habitación mientras trabajaba, sumergido en el trabajo, lamía durante horas, luego explotaba en mi boca, lamía y tragaba todos sus líquidos. A veces trabajábamos horas extras por las tardes.
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Pero me armé de valor y dije que tú también eres muy guapo. Estas palabras salieron de mi boca en un instante. Ni siquiera yo podía creer que estuviera diciendo esto things.My boss se habrá sentido alentado por estas palabras mías, que dijo que deseaba que nos hubiéramos conocido antes de casarnos. Estaba teniendo otro shock y dije que lo desearía. Hubo un silencio por todas partes de nuevo. Los dos nos queríamos, era obvio de cada uno de nosotros. Mi jefe estaba casado, pero era muy guapo y simpático. Obtuve ganancias, iba a ser suya esta noche a toda costa. Nuestro silencio fue roto por las palabras del camarero, ¿te gustaría otra copa de vino? Los dos dijimos que sí al mismo tiempo. Luego nos miramos y nos reímos.Cuando el camarero llenó nuestros vasos, bebí el kedeh en un punto y pregunté si podía tomar otro vaso. Me enojé cuando mi jefe dijo, oh, eres demasiado rápido. Pensé que entendías mis intenciones. Mientras bebía mi tercer vaso, mi jefe sonreía y solo me miraba. „No te rías, todo es por ti que me estás haciendo girar la cabeza“, le dije con expresión de enojo. Mi jefe, tú también me mareas, eres tan hermosa y sexy, y cuando dices lo que no daría por tenerte conmigo en este momento, entonces a qué estamos esperando, realmente te quiero a ti también, vamos al hotel dedim.Bi en el momento en que nos encontramos en una habitación de hotel, tan pronto como cruzamos la puerta, nuestros labios se juntaron y nos estábamos besando como locos. Mientras nos besábamos, nos robábamos el uno al otro del otro lado. En un instante nos encontramos desnudos y en la cama. Mi jefe soltó mis labios, lamió primero mi cuello y luego mis senos, y lentamente descendió hacia abajo. Cuando llegó a mi ombligo, yo estaba inconsciente. Comenzó a lamerme el coño bajando por mi barriga de allí para bajar. Meter y sacar la lengua y luego caminar afuera fue un placer increíble. Cuanto más lamía, más enojada estaba, y no podía soportarlo más, así que vine. Había lamido y tragado todos mis líquidos. Cuando terminaron mis contracciones y recuperé el sentido por completo, inmediatamente agarré su polla y me la llevé a la boca. Primero llevé su cabeza a mi boca y lo lamí y besé. Luego comencé a profundizar lentamente, pero no cabía en mi boca. Como era muy grande, tenía una polla de unos 20 cm, era muy gruesa y no cabía toda en mi boca.Luego me acostó y tomamos la posición 69, y la habitación me estaba lamiendo mientras yo lamía esa gran polla. Metió la lengua en mi coño y la sacó, luego la lamió comenzando desde mi coño hasta mi agujero trasero y la metió de nuevo en mi coño. El hecho de que su lengua tocara mi trasero realmente me excitaba. Me han follado en el coño antes, pero mi culo nunca ha tenido una polla. Por un momento quise esta polla gruesa en mi agujero trasero, y me sobreexcitó. Lo estaba disfrutando tanto, vamos, amor mío, me senté en su regazo, diciéndome que te quiero ahora, y agarré su polla, la coloqué en mi coño y me lancé a sus brazos. Él me sostenía con fuerza por las caderas y me hacía rebotar en su regazo. Me estaba levantando y soltando de mis caderas y metiéndome profundamente en mi coño como laap. Lo estaba disfrutando tremendamente, era muy espeso y me estaba llenando. Pero la idea de que me follaran por el culo en este momento todavía estaba en mi mente, y había escuchado de mis amigos que dolía. Mientras me preguntaba si podría recogerlo, mi jefe dijo que vendría y comenzó a recogerme y dejarme más rápido. Vamos, león, separa mis muslos, aplástame el coño y comencé a eyacular. Pero qué eyaculación estaba teniendo.Cuando terminamos de eyacular, me levanté de él y lo llevé a la boca de nuevo, todavía quería que me follaran, y dije que quería esta gran polla en mi trasero. Estas palabras también deben haber irritado a mi jefe, lo que inmediatamente endureció. También tengo muchas ganas de follarme este trasero, dijo que tienes unas caderas geniales. Luego, cuando le dije qué representas, dijo que tengo miedo de lastimarte. Dije que incluso si me duele o me rompe el trasero, quiero esa polla en mi trasero. Ante estas palabras, mi jefe se pegó a mis labios. Él estaba chupando mis labios en pedazos y mordiéndolos. Luego me hizo agacharme y comenzó a lamerme el culo. Metió la lengua dentro y fuera de ella, y a veces me dio golpes con la lengua en el coño. Dic.Y estaba empezando a rogarle que viniera, me lo metiera, me rompiera el culo. Diciendo que no te apresures, me metió los dedos en la boca y me pidió que la mojara, mientras yo le lamía los dedos, la habitación seguía lamiéndome el culo. Luego puso su polla en mi boca y comenzó a meter sus dedos mojados en mi culo uno por uno. Primero entró y salió un dedo, luego dos y tres. Lo estaba disfrutando mucho y no podía soportarlo más. Lo enrollé frente a ti y dije, vamos, mételo. Iba a morir de emoción cuando agarró tu polla y la puso contra mi agujero trasero. Mi culo iba a ser follado por una polla por primera vez, una polla gruesa.Estaba presionando su polla contra mi trasero, pero no entraba. Cuando dije vamos, empújame, aplástame el trasero, cargó más rápido y su cabeza estaba metida. Con la entrada de su cabeza, solté un grito tremendo, estoy seguro de que mi voz se escuchó incluso desde la recepción. Dolió mucho, pero sabía que te acostumbrarías. Mi jefe salió de mí de inmediato para no lastimarme. Lo acosté y volví a meter su polla en mi boca y la mojé bien. Debería haber tomado esta polla, agarrarla por el torso, alinearla con mi trasero y sentarme, dejándome caer sobre ella. Todo fue de un solo golpe, pero estaba muy dolido. Mi jefe me tapaba la boca para que no se escuchara mi voz. Me senté en él en su totalidad durante un rato. El dolor comenzaba a desaparecer y lentamente comencé a sentarme. Cuanto más me sentaba, más comenzaba a disfrutarlo. Él estaba enfrentando a mi jefe, deteniéndome de mis escapes y ayudándome a sentarme. Ahora el dolor había dado paso al placer. Vamos, amor, separa mis muslos, aplasta mi trasero, empújalo todo, estaba saltando sobre él. Por un lado, nos estábamos besando, nuestros gritos resonaban en la habitación y mi jefe se puso de pie mientras yo estaba en su regazo. Estábamos de pie y yo todavía estaba en su regazo, él separó mis caderas y me hizo rebotar en la parte superior de su polla. Y estaba disfrutando que me follaran por el culo envuelto alrededor de tu cuello.Separó mis muslos de ambos lados, rebotándome en su polla, y los dos estábamos volando de placer, cuando dije que venía, sentí que la polla dentro de mí se volvía más gruesa, ahora él me rebotaba más rápido en su regazo. Los dos estábamos eyaculando al mismo tiempo y disfrutándolo tremendamente. 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Los dos habíamos eyaculado al mismo tiempo, y ahora mi jefe me llamaba a su habitación cada vez que quería y me follaba durante horas.Y a veces lo sorprendía y entraba a su habitación mientras trabajaba, sumergido en el trabajo, lamía durante horas, luego explotaba en mi boca, lamía y tragaba todos sus líquidos. A veces trabajábamos horas extras por las tardes.